Blogia

Impotente a los 40

Erotismo

Erotismo

Hoy he leído un cuento erótico, de esos que sin quererlo te devuelven la pasión, que te entran ganas sin quererlo de tocarte y como no de llegar hasta el final. Leía a un inocente jovencita que a escondidas, a hurtadillas, se introducía en la habitación contigua donde él estaba esperándola… melosa, como una gatita en celo se aproximaba a su víctima entre ronroneos y suaves lametazos. Al mismo tiempo, sus manos buscaban ansiosas el sexo del galán que ya empalmado sólo tenía en mente un objetivo y la mano de la chica no le permitía, tampoco, pensar en nada más...


Ahí es donde yo fallo ¡Coño! No ha habido forma. Ni siquiera imaginándome mi poya en la boca de la tía, lamiéndola con movimientos circulares, de arriba abajo y aspirando hasta la última gota de semen.
He vuelto a salir a pasear para acabar en el mismo lugar. Enfrente de la universidad, aquello es el paraíso para cualquier pervertido. Pienso en estos momentos que me he convertido en la persona que siempre he odiado. Pienso que desearía poder acercarme a cualquiera de ellas y proponerles una noche de sexo como ninguno de los novatos de sus compañeros sabrán ofrecerles jamás. Y en esos momentos pienso en lo que ellos pensarán de mí. Un viejo baboso, que no pierde de vista los culos prietos que suben y bajan las escaleras de la entrada, las miradas lascivas de las jovencitas que intentan batir el récord de folladas entre sus amigas y colarme, entre todos ellos para poder cumplir como un chaval de 20. No estoy orgulloso de saber en lo que me he convertido, pero tampoco encuentro el momento de acabar con todo y empezar definitivamente a aceptar que ya no valgo por mi mismo. Puedo aceptar que necesito ayuda y empezar a leer más sobre esos otros métodos. Pero ¿Y si alguno de mis compañeros se entera y me ponen en su lista negra por pasarme la mitad del tiempo con la mano en los bolsillos buscándome la polla que nunca me encuentro? Uff…miedo, ese es el principio y el fin de la cuestión.
Necesito una solución, necesito volver a sentir placer en algo que, como a todos, me ha gustado tanto. Pero necesito información para hacerlo de la forma más discreta posible.

PresentaciĆ³n y testimonio

Es duro y me cuesta aceptarlo. Por eso, entenderéis que no diga mi nombre aunque para comunicarnos de alguna manera, me llamaré G. Quizá sea el punto de una mujer que me gustaría encontrar, pero debido a mi gran problema me paso el día ejercitando la mano. Por lo menos sé que de artrosis no moriré.

Bueno, ahí va la confesión, soy im potente. Por separado suenan hasta bien. Joder quien pudiera vovler a los 20, si así fuera no desperdiciaría ni un segundo de esas innumerables noches de frenesí.

Me he burlado del famoso anuncio de Pelé hasta la saciedad..¿A quién se le va a agotar la energía de la poya? ¡Y con lo que m e gusta a mí! Te lo esperas de un abuelo, o un viejo, no sé, pero ¡Joder que sólo tengo 40 años!..¿Con qué cara voy yo a presentarme en una farmacia para pedir una pastillita energética? Todos me van a mirar, me van a juzgar ¿y mi virilidad?, bueno, ¡Por no decir que cara de imbécil se me quedaría si el dependiente es una tía!..¿Y si encima está buena? Creo que recurriré al tan apreciado internet...fuera royos, tío, que cuando vaya a  hablar con una farmaceútica, sea, por lo menos, para follarmela (aunque sea con algo de magia).

Pues aquí inicio este viaje con vosotros, a partir de ahora os iré contando cada nuevo dato que experimetne o me entere de este maravilloso producto que aún no he probado y estoy deseando que funcione por que ya no se como hostias quitarme las llagas de la mano. Algún día os detallaré la cantidad de técnicas que he llegado a desarrollar en esta práctica. Pero poco a poco, que no quiero que penséis de mi que soy un pervertido (ojalá).

Un saludo para todos y un guiño a los potentes